La producción de una empresa es como un ecosistema en el que varias personas, áreas y actividades se concentran para lograr uno o varios objetivos. Sin embargo, cuando no se tiene un control de la producción los errores y las pérdidas se hacen presentes. Es entonces cuando el caos abunda en la organización y con él llega una gran cantidad de problemas. ¡Nosotros te decimos cómo evitar esto!
Todas las organizaciones, independientemente de su tamaño, utilizan el control de la producción hasta cierto punto. En organizaciones pequeñas, el control de la producción puede ser realizado por una sola persona. Mientras que en compañías que son mucho más grandes y complejas, existe un departamento específico que normalmente está bien organizado y es altamente especializado.
El control de la producción presupone la existencia de planes de producción e implica el uso de varias técnicas de organización para asegurar el desempeño de la producción según el plan previamente establecido. La coordinación de recursos humanos, materiales y tecnológicos es el resultado de este proceso.
Entonces podemos decir que para tener procesos definidos y tiempos de operación eficientes, una empresa necesita implementar un control de la producción. Además de ayudar a gestionar estas actividades, este método tiene como objetivo definir qué producirá la empresa y con qué recursos. También define la secuencia entre cada fase, el seguimiento y optimizaciones durante la ejecución.
Veamos más a fondo de qué se trata este proceso, así como sus beneficios y características.
¿Cuál es la definición de control de producción?
El control de producción puede definirse como el proceso de planificación de la producción antes, durante y después de cada operación y tarea. Es decir, en él se establece la cantidad de artículos y se prevén los materiales y tiempos; asimismo se establecen las rutas exactas, la continuidad del montaje, las fechas de entrega, el procedimiento del ensamblaje y la forma en que se va a monitorear cada pedido, entre otras actividades.
El control de la producción es el arte y la ciencia de asegurar que todo lo que ocurre está siendo regulado y monitoreado conforme a las necesidades de la empresa y el cliente. Algunas de sus finalidades son lograr las metas definidas de producción, el uso óptimo de los recursos disponibles, generar mayores ganancias a través de la productividad, crear mejores productos que tengan una buena relación calidad-precio, etc.
¿Por qué es importante implementar el control de la producción en tu empresa?
Un sistema de control de producción sólido contribuye al funcionamiento eficiente de cada área y empresa en general. En términos de fabricación de los pedidos de los clientes, el control de manufacturación asegura una fecha de finalización y entrega más efectiva y precisa. Además, también promueve la generación de un plan y orden de los procedimientos de fabricación caóticos.
Esto no solo aumenta el rendimiento del negocio, sino que también lo convierte en un lugar más agradable para trabajar. Ya que cada uno de los involucrados sabe exactamente lo que debe hacer, en qué momento y de qué forma.
Un control efectivo de la producción también mantiene los inventarios de trabajo al mínimo, lo que hace posible un ahorro real tanto en mano de obra como en inversión material. Por lo tanto, este proceso ayuda a las empresas a operar y producir de manera más eficiente y lograr los costos más bajos posibles.
¿Cuáles son las características y objetivos en el control de la producción?
Un sistema de control de producción eficaz requiere información confiable, una estructura organizativa sólida, un alto grado de estandarización, así como personal capacitado para su exitosa operación. Entre otras de sus características podremos encontrar las siguientes:
- Ayuda a confirmar la cantidad de artículos por fabricar
- Busca la forma de aprovechar todos los recursos de la mejor manera
- Permite establecer formas y medios para evaluar las tareas
- Promueve la implementación de mejoras y la toma de decisiones
Sus objetivos en el control de la producción, que más adelante se convertirán en beneficios pueden ser muchísimos tanto a corto como a largo plazo, pero para que tengas una idea de su importancia te compartimos algunos de ellos.
- Hacer que los procesos operativos y de entrega se realicen más, por lo que ayudan a ahorrar tiempo.
- Aumentar la productividad a través de la organización y programación de tiempos efectivos.
- Crear un sistema y un plan de control que se refleje por fases, siempre tomando en cuenta las metas establecidas.
- Realizar pruebas y experimentar con distintos sistemas de control para encontrar un proceso adecuado para la empresa.
- Facilitarle a los colaboradores herramientas e incentivos para mejorar el trabajo en equipo y promover la productividad.
En este momento tal vez estés considerando integrar el control de producción a tu organización y flujo de trabajo, así que te daremos algunos consejos para que puedas lograrlo de forma fácil.
5 pasos para implementar el control de producción
1. Mantén un flujo de rendimiento continuo
Tu cadena de suministro no debe detenerse en ningún momento, por lo que deberás analizar su funcionamiento actual y así buscar aquellos factores que lleguen a pausarla aunque sea por corto tiempo. Más adelante podrás deshacerte de estos obstáculos para que todo fluya de forma constante, y así agilizar todas las actividades.
2. Estandariza y busca que no haya inconsistencias
Quizá habrá ciertas cuestiones que cambiarán de un día de producción a otro, pero deben ser mínimas. Deberás tener lineamientos inmodificables como procedimientos de seguridad, formas de entrega, tiempos de producción por artículo, horarios de trabajo, entre otros. Entre más estandarizado tengas cada detalle en tu control de producción, más fácil será de ejecutar.
3. Planea cada fase de tus sistema de control
Un plan será el mapa de toda tu producción, por lo que es imprescindible contar con uno. En él podrás agregar las asignaciones de cada área y colaborador, las actividades, tiempos de terminación, cantidad de artículos y materiales por usar.
4. Crea instrucciones claras al inicio
Las instrucciones del proceso deben ser comunicadas de forma clara, ya que de ser ambiguas podría dar cabida a errores y confusiones. Puedes redactarlas y tenerlas a la vista de todos los involucrados, así conforme se cumplan, los colaboradores se irán acostumbrando y por lo tanto se convertirán en hábitos diarios.
5. Asegúrate de que los cambios no generen pérdidas
La evaluación y optimización debe ser parte de toda implementación, sin embargo deberás tener cuidado con las grandes modificaciones que quizá no sean necesarias. Estas podrían detener la producción y por lo tanto hacer que tú y tu equipo pierdan tiempo y dinero. Ejecuta todos los cambios durante la fase más temprana y busca soluciones menos bruscas cuando ya tengas un sistema de control de producción ya establecido.
Los numerosos beneficios de la planificación y el control de la producción muestran que puedes aumentar los ingresos de una empresa maximizando la utilización de tus recursos. En general, si los componentes individuales dentro de la organización no funcionan bien juntos, solo habrá una cantidad limitada de éxito para toda la operación de fabricación. Por ello también te recomendamos utilizar herramientas como una plataforma de gestión de recursos que te permitirá tener monitoreado cada factor de tu producción.
Asimismo, te ofrecemos más información valiosa sobre la mejora de tus operaciones en nuestro artículo ‘8 consejos para optimizar de buena forma tus costos de producción’.